domingo, 29 de marzo de 2009

Bilbao

Distintas maneras de pensar implican vidas opuestas. Una vida que gira en torno a sus ideas. La ría, separa el casco viejo de una ciudad que se modernizó tras el Gughemheim.Un amor por la tierra y por el Athletic es lo que une a todas sus gentes, voten a quien voten en las elecciones. Bilbao es una ciudad diferente, fuerte, con carácter, cosmopolita, llena de arte... y, en gran medida, hoy es así gracias a sus habitates.


Por circunstancias familiares, siempre le he tenido un especial cariño a Euskadi, siempre me ha parecido un lugar mágico y lleno de una luz diferente. Una luz difícil de ver, pero que cuando la descubres ya no hay marcha atrás, te atrapa más que cualquier otro lugar.

Bilbao tiene un casco viejo lleno de interés. El puente de la Merced construido en 1937 consigue unir las dos orillas de la ría bilbaína. El Mercado de la Ribera, lleno de color por sus grandes vidrieras. La plaza nueva, en la que se encuentra la Euskaltzaindia, la RAE del euskera, es característica por sus palmeras y las tabernas que la rodean para hacer de los pintxos la comida típica.


En definitiva, los paseos, el Ayuntamiento, las tiendas, los pintxos, la gente, las calles... consiguen que no quieras salir de alli.




Y cuando conoces Getxo y la playa de las Arenas, no te queda ninguna duda. El Puente Colgante es digno de admiración. Es una estructura de hierro que une Getxo con Portugalete salvando la ría del Nervión. Funciona las 24 horas transportando personas, pasajeros y vehículos. En julio de 2006 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Desde el paseo marítimo no puedes dejar de mirar. A la derecha, las casas con siglos de antigüedad y modernizadas con los años de las familias burguesas vascas del siglo XIX. A la izquierda, el mar, un mar rodeado de monte por todas partes.



Bilbao, es uno de los rincones que no os podeis perder. Ongi Etorri :)

lunes, 23 de marzo de 2009

Valencia

Si alguna vez tuviera que elegir algún sitio en el que vivir que no fuera Madrid, diría Valencia. Creo que tiene todo lo que una persona puede querer que tenga su ciudad: buen clima, metro, aeropuerto, tiendas, playa, buenos paseos por el centro, calles peatonales, mercados típicos, centros comerciales…

La razón por la que fui a Valencia fue el Gran Premio de Fórmula 1 del verano pasado. Era el estreno del circuito valenciano. Las calles estaban llenas de gente de todos los lugares del mundo. Cada uno con la bandera de su equipo o piloto favorito. Los hoteles, apartamentos, camping, etc. con el cartel en la puerta de todo ocupado.


La ciudad me pareció perfecta. En dos días de paseos por el centro ya me sentía como en mi casa. El mercado central es precioso. Numerosas tiendas reunidas en un edificio de cúpula espectacular desde hace cientos de años. El mercado surgió en la Valencia árabe, alrededor de la mezquita. Dada la importancia agrícola y la densidad demográfica, parece ser que se mantenía también un mercadillo en el arrabal de la Boatella (extramuros), prolongación del barrio de la Alcaicería, que se caracterizaba por la ordenación del comercio especializado, auténtico cordón umbilical unido a la carnicería y matadero situados en la actual plaza Redonda, próxima a la plaza de Les Herbes, luego Peixcatería y, finalmente, Lope de Vega.



Valencia es un rincón para ir y disfrutarlo, en la época del año que sea, porque en esta ciudad siempre es primavera.


jueves, 12 de marzo de 2009

Galicia

El agua gélida de la playa. Peregrinos camino de Santiago. Las rías, las meigas, el Atlántico... Casas rurales donde desayunar filloas... En definiva, Galicia. Cierra los ojos, respira hondo y disfruta de un lugar diferente, verde y tranquilo.

La Coruña. Tiene el paseo marítimo mas largo y bonito que he visto nunca. Crees que nunca va a acabar pero cuando llegas al final y ves a lo lejos la Torre de Hércules te das cuenta de que ha merecido la pena el paseo. A este monumento le siguen numerosas leyendas, la más conocida es la que cuenta que en estas tierras habitaba el gigante Gerión y los habitantes del pueblo le temían. Hércules, hijo de Zeus, se enfrentó a él y consiguió vencerle. Por ello ordenó construír una torre conmemorando esta victoria. Se cuenta que la primera persona en habitar estas tierras ya libres fue la mujer llamada Cruña, que daría nombre a la ciudad. Cuando me lo contaron, me pareció de especial interés que en el escudo de La Coruña aparezcan la Torre de Hércules y la calavera de Gerión.

Santiago de Compostela es un lugar que habría que visitar al menos una vez en la vida, como La Meca. Cuando llegué a la Plaza del Obradoiro pensé en la de veces que había visto esa imagen por la televisión o en revistas con la llegada de los peregrinos enseñando las ampollas de sus pies, pero me parecía muy diferente. Enorme, llena de luz y de gente. La Catedral de Santiago es impresionante. Me impactó ver a gente llorando a la entrada, con cara de cansancio y vieiras colgando de sus mochilas.



Pero, sin duda, lo que más me llamó la atención de Galicia fueron sus rías. Nunca había visto nada igual. La separación de España y Portugal desde hace siglos debió tener su origen en aquella separación física. Una parte del río Miño separa los países. Las rías se forman porque el mar se introduce en la tierra de una forma espectacular. Y continuando con las leyendas, se cuenta que Dios al descansar después de realizar la Creación se apoyó en su mano, dejando las huellas de sus dedos en Galicia y así, se formaron las Rías.

Galicia, a 600 Km desde Madrid pero que, sin duda, merece la pena recorrer. Sempre Mais :)

miércoles, 4 de marzo de 2009

Sevilla


Siempre había querido conocer Sevilla. Me parecía que tenía que ser un rincón lleno de luz y muy acogedor. No me equivocaba. Llegamos un 10 de agosto a las 12 de la mañana. Momento clave. Nunca he sentido tanto calor. A pesar de ello, el Guadalquivir daba una sensación de frescura muy agradable. Pasamos de un lado a otro del río por el puente de Triana, que separa ese barrio del resto de Sevilla.

Andando llegamos a la parte donde en 1929 se inaguró la Exposición Iberoamericana . Aún perduran los edificios que los países construyeron para mostrar a los sevillanos y al resto de los españoles que la visitaran sus costumbres. La plaza de España es la parte dedicada a nuestro país y cuenta con una fuente en el centro y, rodeando la plaza, azulejos con diferentes dibujos en representación de cada ciudad española. Numerosos puestos de venta de abanicos y muñecas sevillanas para encima de la televisión dan color al paseo.

Cuando llegas a la Giralda no puedes creerte que vayas a subir hasta arriba a pie. Desde luego, después de unos 18 pisos y mucho cansancio, merece la pena. Puedes ver toda la ciudad desde un lugar privilegiado. Me quedé allí plantada, sólo mirando, sin decir nada, durante más de 20 minutos. Era impresionante.


La plaza de toros es preciosa. La típica plaza que cualquier turista extranjero quiere ver cuando llega a España. La Maestranza de Sevilla.No paramos de andar hasta que ya no podíamos más. Los camareros, dependientes de tiendas, etc siempre nos atendían con una sonrisa.

Sevilla cuenta con aeropuerto, estación de ave, de autobuses e incluso puerto. No hay excusa para no pasar unos días de sol y alegría en este rincón andaluz.